En un trabajo conjunto con organismos uruguayos que ya tienen la práctica y resultados en tal sentido, técnicos del INTA de Paraná pudieron elaborar un diagnóstico del estado de los terrenos y del ganado. Con soluciones relativamente sencillas que permitan a los productores ordenar su manejo ganadero se pueden lograr muy buenos resultados en poco tiempo.
“La ganadería de cría es muy importante para nosotros, a partir de stock de vacas que representa para la provincia y como una actividad muy arraigada dentro de los productores y nos encontramos que éstos sistemas ganaderos de cría tienen los índices productivos y reproductivos estancados desde hace muchísimo tiempo, no logran mejorar esa productividad y lo que es peor no logran mejorar el ingreso económico del productor “, dijo la Ing. Agr. Lucrecia Lezama.
La profesional aseguró que como consecuencia “se degradan los sistemas donde se está desarrollando esa ganadería que son bosques nativos del espinal”.
Ante este escenario preocupante se lleva adelante el proyecto que “se basa en poner en valor y medir en casos reales de productores, mostrar esos resultados tanto productivos, económicos y ambientales para presentar una propuesta de cómo se pueden mejorar”, explicó Lezama.
En ese sentido destaca que “los sistemas ganaderos del norte de Entre Ríos tienen un bajo consumo energético, por lo que la propuesto se basa en incrementar el consumo en la vaca de cría, la principal fábrica de terneros con la que contamos, pero además mejorando ese consumo energético se mejoran indicadores ambientales como la erosión del suelo, la biodiversidad y la captura de carbono”.
Cómo lograr aumento del consumo energético
“La clave es ajustar la carga, cambiar el manejo, en principio hay que ordenar teniendo prioridades, empezar a pensar como una empresa y tomar decisiones en función de eso, y partir de ahí trabajar con mayor disponibilidad de forraje, con mayor cantidad de pasto, eso permite potenciar procesos como la fotosíntesis, por ejemplo, podemos producir más pasto con lo mismo, podemos producir más carne y podemos conservar el ambiente” sostiene.
“El desafío para los productores no es menor porque implica estar dispuestos a cambiar la forma de producir y la co innovación habla de involucrar a los productores en las tomas de decisiones, no son meros observadores, ellos son los que toman el riesgo y nosotros podemos darles el soporte técnico.El desafío está dado y ya son muchos los productores involucrados y entusiasmados en sumarse a este cambio de paradigma”, indicó la profesional del INTA.
Respecto a los resultados del proyecto nos aclaró “el trabajo recién comienza como para empezar a medir resultados, no obstante estamos llevando adelante la experiencia conjuntamente con profesiones de la Universidad de la ROU-República Oriental del Uruguay y el INIA- Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria, y ellos al año de implementar el proyecto comenzaron a ver resultados positivos, es un proceso que se va retroalimentando positivamente porque el productor incorpora nuevas prácticas, es un aprendizaje social fundamental para nosotros” concluyó.
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