Destacada Economías Regionales

Resultados de análisis de residuos de pesticidas aplicados bajo BPA en cítricos del NEA

Del 11 al 14 de junio se llevó a cabo en la ciudad de San Miguel de Tucumán el IX Congreso Argentino de Citricultura. Dicho evento reunió a investigadores de varios países, asesores técnicos, productores y estudiantes permitiendo el intercambio de conocimientos y un espacio para interactuar y debatir sobre los problemas actuales de la citricultura.

La participación por parte de INTA Concordia contó con disertaciones y trabajos presentados en versión póster.

Una de las disertaciones estuvo a cargo de la M. Sc. Lic. Cecilia Kulczycki sobre “Residuos de pesticidas aplicados bajo BPA en cítricos del NEA”. En dicha disertación presentó resultados sobre los niveles de residuos detectados en las estrategias de control químico de enfermedades y plagas recomendadas por INTA Concordia. Además, comentó sobre resultados promisorios de la aplicación de fungicidas, aún sin registro, en poscosecha.

Otra de las disertaciones fue “Presentación del Centro Único de Introducción y Saneamiento (CUIS) de la EEA Concordia” a cargo de la Lic. Giovanna Joris, sobre la historia de nuestro Centro de Saneamiento, sus instalaciones y las actividades que se realizan.

“Residuos de pesticidas aplicados bajo BPA en cítricos del NEA”

Según lo expresado por la M. Sc. Lic. Cecilia Kulczycki en su disertación,  “la región del Río Uruguay se caracteriza por la producción de cítricos “dulces” , fundamentalmente naranjas y mandarinas. Si bien el destino de la producción de cítricos es la fruta en fresco exportable, un importante volumen es destinado al mercado interno y a industria”.

No obstante aclara que “existen factores críticos limitantes que hacen perder competitividad a los citricultores de la región. Tal es el caso de los contenidos de residuos de pesticidas en frutas que superan los niveles de tolerancia impuestos por los países importadores”.

La profesional del INTA indica que “debido a la gran cantidad de productos permitidos que se encuentran en el mercado, se ignora si son usados correctamente ya que existe falta de conciencia de algunos productores, y esto hace presuponer que se está lejos de su uso óptimo, evitando derroches con pérdidas económicas y el impacto negativo en el medioambiente, además de afectar la inocuidad de las frutas que ponen en riesgo la salud del consumidor”.

“Existe la oportunidad de prevenir esta situación trabajando con Buenas Prácticas Agrícolas, tecnologías reconocidas aplicadas desde el campo, como Manejo Integrado de Plagas, Tree Row Volume cumpliendo con las tolerancias exigidas por SENASA (Res.934/10), y países compradores. Además, SENASA no estipula valores de límites máximos de residuos (LMRs) en jugos y aceites para todos los pesticidas aprobados en cítricos. Se exceptúan sólo 11 de los 85 principios activos; todos con valores para jugo y pulpa, y trifloxystrobin en aceite de pomelo”, especificó  Kulczycki.

La profesional dijo que “desde hace varios años, en la EEA Concordia del INTA se vienen desarrollando curvas de degradación para el conocimiento de la cinética de cada plaguicida (por ej. chlorpyrifos, cypermethrin) y así determinar el momento óptimo de cosecha según el mercado de destino; medición de residuos en las frutas al momento de cosecha luego de realizar los controles químicos de plagas y enfermedades (spirodiclofen, pyraclostrobin, fluxapyroxad); y, estudios enpost cosecha, cuando la fruta sale del empaque y la trazabilidad a la llegada a los diferentes mercados (propiconazole, carbendazim, azoxystrobin). Todos los resultados se encuentran por debajo de los LMRs estipulados para Argentina”.

“Por último, se realiza monitoreo y diagnóstico de los residuos presentes en naranjas al llegar a diferentes fábricas y su traspaso a cada subproducto industrial (jugo y pulpa, jugo concentrado).Los análisis se realizan en el Laboratorio de Pesticidas en fruta entera y en jugo y pulpa. Los residuos se extrajeron bajo el procedimiento (CEN) Standard Method EN 15662 y se analizaron por cromatografía líquida acoplado a espectrometría de masas de triple cuadrupolo en tándem (LC-QqQ-MS/MS). La metodología se validó para cítricos siguiendo el procedimiento europeo SANTE/11813/2017. Se seleccionaron 38 p.a. utilizados en la zona más otros con posibilidad de estar presentes: Se detectaron un total 12 p.a. que se utilizan comúnmente en campo y post cosecha: azoxystrobin, thiabendazole, pyraclostrobin, prochloraz, imidacloprid, imazalil, carbendazim, propiconazole, difenoconazole, pyrimethanil, tebuconazole, dimethoate”, especificó.

Según el trabajo de Kulczycki “se observó la co-existencia entre 2-7 p.a. por muestra. La concentración fue variable como así su presencia en las diferentes matrices. Se destaca la presencia en jugo concentrado de fungicidas de post cosecha como propiconazole y pyrimethanil, ambos con valores hasta 0,04 mg/kg. Es importante considerar la presencia sistemática de imazalil en frutas (≤ 2,54 mg/kg) y su transferencia a jugo y pulpa (≤ 0,05 mg/kg) y jugo concentrado (≤ 0,15 mg/kg). Valores iniciales de residuos en fruta disminuyen al medirse en jugo y pulpa pero vuelven a aumentar al concentrarse el jugo. Si se considera el “factor de procesamiento”, de 6.5 veces, para jugo concentrado, los valores disminuyen sensiblemente hasta ND”.

La profesional indicó que “es necesario la continuidad de los estudios de trazabilidad de residuos para así poder determinar la persistencia de cada plaguicida según sus características y modo de uso previo a la llegada a fábrica”.

Cabe destacar que el equipo de Trabajo está conformado por Alexis Sosa, Vanesa Hochmaier, Ricardo Mika, Rubén Díaz Vélez, Lourdes Burdyn y Noelia Silva.

 

error: Si reproduce información de este medio, por favor, citar la fuente
WhatsApp chat