Las decepcionantes precipitaciones del miércoles y jueves de la semana pasada, fueron compensadas sobradamente con una muy buena oferta de agua en la transición intermensual.
En efecto, las lluvias que se sumaron en las últimas horas, comenzaron a registrarse en forma débil y dispersa durante la última jornada de agosto, fortaleciéndose durante la tarde noche del primer día de septiembre y la madrugada del miércoles.
Además del buen volumen de precipitaciones, la forma de llover fue muy beneficiosa en términos de la incorporación del agua al perfil.
El Observatorio Agrometeorológico de la EEA del INTA Paraná informó que Septiembre acumula 32.7 mm.
➡️La intensidad fue menor a 3 mm/h
➡️ escorrentía casi nula
➡️ sin arrastre de suelo ni mantillo
“El ingreso de aire bastante frío se mezcló con una fuerte presencia de aire húmedo, lo cual hizo muy eficiente condensación en las capas bajas de la atmósfera. No hubo gran inestabilidad, no se dieron tormentas destacadas. Las imágenes satelitales siempre mostraban nubes de tipo stratocumulus, de escaso desarrollo vertical. Sin embargo, esto comenzó el lunes por la noche y duró hasta avanzado el miércoles. Es decir, la continuidad de la mezcla de aire frío con el aire húmedo propicio estas lluvias que sumaron por arriba de lo esperado. Una situación muy beneficiosa y más que oportuna”, indicó el SIBER.
Desde el SIBER , no obstante dijeron que “debemos ser criteriosos en el análisis de este evento. En el mapa podemos reconocer una distribución de lluvias que ya se observó durante junio, con tendencia desfavorecer al sudoeste de la provincia. Si solo analizamos la suma que muestra el mapa, estaremos de acuerdo que el acumulado en el sudoeste es relativamente bueno, si tenemos en cuenta que en septiembre la media mensual es de 60 milímetros. Sin embargo, si vemos hacia los departamentos del centro y norte provincial, detectamos que esta marca mayoritariamente ya se alcanzó, es decir, todavía hay un patrón que no logra incorporar al sudoeste con un piso de lluvias más elevado. Sigue siendo, entonces, la zona más vulnerable de la provincia“.
Estado de las reservas
“El balance hídrico presenta una recarga muy significativa en todo el territorio de la provincia respecto de la semana pasada. Los excesos son corrientes en casi toda la franja este de la provincia, con sectores del sudoeste donde se detectan áreas que hubiesen necesitado un poco más”, informó el SIBER.
“El mapa claramente nos lleva a focalizar el análisis sobre el sudoeste provincial. Las últimas precipitaciones seguramente posicionan de mejor forma a los lotes de trigo que a mediados de mes van a comenzar a florecer. Por otra parte, acumulados pluviales del orden de los treinta milímetros, seguramente han generado las recargas superficiales necesarias para avanzar con las siembras de maíz, las cuales seguramente serán apoyadas por un comportamiento térmico más moderado, ya con menor chance de que se observen heladas. Siguiendo este análisis podemos decir que el corto y mediano plazo está razonablemente resuelto. Ahora bien, las áreas donde el balance hídrico se resuelve con la categoría regular, no dejan de ser una señal de riesgo. Potencialmente, estas áreas pueden estar bastante cercanas a un nivel adecuado de reservas, pero revelan que la corrección hídrica en este sector no ha sido plena”, advirtieron.
Desde el SIBER anticiparon que “al menos durante una semana, pueden ser diez días, las lluvias quedarán ausentes en el territorio entrerriano. Hacia el próximo fin de semana se verá cual es el comportamiento del frente que puede favorecer el regreso de las precipitaciones a la provincia. Si durante todo este tiempo, se observa una buena circulación de aire del noreste y, aun bajo condiciones de mucha estabilidad, las temperaturas lentamente van creciendo, seguramente estaremos ante una buena posibilidad de que se concrete un evento pluvial satisfactorio. El objetivo principal de septiembre es proveer al sudoeste de ER de al menos 60 mm de lluvia, todo lo que sobra suma positivamente”.
Comentar