Más allá de los beneficios del limón o la mandarina , nadie puede negar que la naranja es la gran protagonista de las mañanas en los hogares.
Un café o té, un poco de leche, unas tostadas y… un jugo de naranja. Si es recién exprimido, mucho mejor, y en este punto los entrerrianos somos muy exigentes .
Al igual que otros cítricos, esta fruta aumenta la secreción de bilis y estimula el vaciamiento de la vesícula biliar. Por lo tanto, reduce los trastornos relacionados a ese desequilibrio: pesadez estomacal, dolores de cabeza, presión en el costado derecho del abdomen, etc.
Beber jugo de naranjas en ayunas tiene muchos beneficios como por ejemplo hemoglobinizar la sangre y controlar el peso corporal.
Las naranjas tienen una buena cantidad de antioxidantes. Estos se unen a la vitamina C para combatir el envejecimiento y aliviar problemas gastrointestinales (por ejemplo, las úlceras y la gastritis).
También ayudan a mejorar la cicatrización de las heridas o acelerar los procesos posoperatorios y a prevenir enfermedades.
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